Jamin-a
Jamin-a
(Letra en ligur, dialecto genovés)    

Lengua 'nfeuga Jamin-a
lua de pelle scûa
cu'a bucca spalancà
morsciu de carne dûa
stella neigra ch'a lûxe
me veuggiu demuâ
'nte l'ûmidu duçe
de l'amë dû teu arveà.

Ma seu Jamin-a
ti me perdunié
se nu riûsciò a ésse porcu
cumme i teu pensë.

Destacchete Jamin-a
lerfe de ûga spin-a
fatt'ammiâ Jamin-a
roggiu de mussa pin-a
e u muru 'ntu sûù
sûgu de sä de cheusce
duve gh'è pei gh'è amù.

Sultan-a de e bagasce
dagghe cianìn Jamin-a
nu navegâ de spunda
primma ch'à cuæ ch'à munta e a chin-a
nu me se desfe 'nte l'unda
e l'ûrtimu respiu Jamin-a
regin-a muaé de e sambe
me u tegnu pe sciurtï vivu
da u gruppu de e teu gambe.

Lengua ardiente Jamin-a,
loba de piel oscura,
con la boca abierta de par en par,
bocado de carne dura,
estrella negra que brilla,
me quiero divertir
en el húmedo dulce
de la miel de tu colmena.

Hermana mía Jamina,
perdóname
si no logro ser guarro
como tus pensamientos.

Sepárate Jamina,
labios de uva espina,
déjate admirar Jamina,
flujo de vulva rebosante
y la cara en el sudor,
jugo de sal de muslos,
donde hay vello hay amor.

Sultana de las meretrices,
danos despacio Jamina,
no navegues de orilla
antes que el deseo que sube y baja
no se me deshaga en la ola
y mi última respiración Jamina,
reina madre de las zambas,
me la reservo para salir con vida
del nudo de tus piernas.

     
    (Traducción José Antonio)
     
Canción publicada en el disco "Crêuza de mä (1984)"
 

Jamin-a es una canción con contenido altamente erótico dedicada a esa mujer ardiente que todo marinero del mediterráneo desearía encontrar en cada puerto donde su nave atraca. Jamina-a,  mujer de labios de uva, de lengua ardiente, de piel oscura, de carnes prietas es una incansable máquina del sexo, sultana de las meretrices, capaz de satisfacer los más secretos deseos carnales.

"Jamin-a es una amiga argelina. Todos ellos, pero sobre todo la prensa más retrógada, dijeron de ella que era una prostituta y, en cambio, es una espléndida compañera de viaje. ¡Ojalá hubiera más Jaminas! Quiero decir: es una Bocca di Rosa vista a través de una experiencia personal. Y es quizás la única canción erótica en mi repertorio". [Alfredo Franchini, Uomini e donne di Fabrizio De André, pp. 73-74]

A través de los sonidos y gritos del mercado de pescado de Génova, Jamin-a nos lleva al mundo del erotismo. No se la puede llamar prostituta, aunque se le llame "sultana de las meretrices": es una máquina perfecta de sexo, es una disfrutadora incansable de los deseos de la carne, es esa mujer que escondemos dentro incluso de nosotros mismos, pero que desearíamos conocer, al menos una vez, en su navegar. Los adjetivos para definirla abundan: lengua ardiente - loba de piel oscura - bocado de carne firme - jugo de sal de musloss - estrella negra que brilla - labios de uva espina... El lenguaje siempre se mantiene lejos de la vulgaridad y el texto no tiene nada que envidiar a algunos poemas de Catulo. [Matteo Borsani - Luca Maciacchini, Alma salva, p. 137]

Canción de contenido duro [...]. No la llames prostituta, harías enfadar al autor que la ha escrito al pensar que la llamas bestia del sexo. ¿Quién es Jamin-a? [...] Jamin-a es la acompañante de un viaje erótico que cada marinero espera, o mejor, que quiere encontrar en cada puerto después de los peligrosos viajes sufridos provocados por un mar embravecido o un comandante inepto. En Génova hay un dicho popular - recuerda Fabrizio - que se refiere a las personas que navegan y traducido al español, dice lo siguiente: "Estimada esposa, pasado el monte Portofino me vuelvo libre y soltero". Jamin-a es, por lo tanto, la recompensa que el marinero quiere recibir por el riesgo asumido, por su peligroso ejercicio de obediencia al enfrentarse a la aventura del mar. [Alfredo Franchini, Uomini e donne di Fabrizio De André, p. 45]

https://www.antiwarsongs.org/canzone.php?lang=it&id=47671

Quien no esté muy acostumbrado a las disciplinas del Kamasutra se quedará un poco escandalizado. Sin embargo este texto de aquí, es un texto milagroso. Milagroso porque no solo no es vulgar (De Andrè no conoce la vulgaridad) sino que parece una paradoja como una poderosa metáfora del Amor, del real, del ideal, del visceral; porque el aspecto tribal es suplantado por el aspecto cerebral, la necesidad primero física por la posterior mental: tan deseada como precaria, pero tan real como es el enamorarse. Jamin-a es el final de una búsqueda: el Amor imaginado.

En un programa emitido por la Rai 2, Fabrizio habló de Crêuza de mä y de Jamin-a:"[...] Alguien, por ejemplo, me preguntó quién es Jamin-a. Bueno, Jamin-a no es un sueño, sino la esperanza de una tregua. Una tregua frente a un posible mar de fuerza 8 o incluso un naufragio. Quiero decir que Jamin-a es una hipótesis de aventura positiva que en un rincón de la imaginación del navegante siempre encuentra espacio y refugio. Jamin-a es la acompañante de un viaje erótico que cada marinero espera, o mejor, que quiere encontrar en cada puerto después de los peligrosos viajes sufridos provocados por un mar embravecido o un comandante inepto. En Génova hay un dicho popular que se refiere a las personas que navegan y traducido al español, dice lo siguiente: 'Estimada esposa, pasado el monte Portofino me vuelvo libre y soltero'. Jamin-a es, por lo tanto, la recompensa que el marinero quiere recibir por su propio riesgo, por su peligroso ejercicio de obediencia de enfrentamiento contra la aventura.

He dicho que Jamin-a es más un deseo que un sueño por parte del marinero, lo que contrasta con lo que Gianni Granzotto ha podido extraer en su maravilloso 'Cristóbal Colón' de la psicología del almirante del mar oceánico. De hecho, Colón, un hombre de gran genio, en el momento en que su imaginación y realidad demostraron no coincidir, en este punto, se convenció de que la realidad estaba equivocada, tanto que Granzotto la compara, para mi con razón, como con una especie de Don Quijote. Colón estaba convencido hasta el día de su muertede haber descubierto Japón y no América.

Volviendo a Jamin-a, un simple marinero no puede permitirse tanto lujo. Quiero decir que si el encuentro de Jamin-a difiere del imaginado, eh, bueno, Jamin-a está bien, es suficiente frente a los sueños y el triunfo de los sentidos. No olvidemos lo que Tomasi di Lampedusa le dice a su Gattopardo: "Conozco a mi esposa desde hace casi cuarenta años y nunca he visto su ombligo". Aquí seguramente con una Jamin-a un inconveniente de ese tipo no es ni siquiera un hipótesis posible [...] ".

http://guide.supereva.it/de_andre/interventi/2005/06/213725.shtml

 
Versiones de la canción:
     - Crêuza de mä (1984)  (Estudio Oficial)
     - Concerti (1991)
     - In concerto Vol. 2 (2001)
     - I concerti 1984 - "Crêuza de mä" (2013)
     - I concerti 1992/1993 - "In teatro" (2013)
     - I concerti 1997 - "Anime Salve " (2013)